Ingrediente Natural

El ingrediente natural es una verdadera fuente nutricional

Por definición, un ingrediente natural es cualquier sustancia que se obtiene directamente de la naturaleza y no ha sido sometida a procesos químicos o sintéticos significativos.

En otras palabras, este ingrediente es el que se extrae directamente de plantas o minerales, sin la adición de productos químicos o sintéticos que puedan alterar su composición.

Este tipo de ingredientes se utilizan a menudo en la fabricación de alimentos, bebidas, cosméticos y medicamentos.

Se valoran por sus propiedades nutricionales y terapéuticas, además de considerarse más seguros y saludables que los ingredientes sintéticos.

Lo ideal es consumirlos en su forma natural, pero pueden consumirse en formatos más cómodos manteniendo su nivel nutricional, como harinas, comprimidos o incluso en bebidas.

¿Por qué debemos incluir estos ingredientes naturales en nuestra rutina diaria?

Los ingredientes naturales suelen valorarse por sus beneficios para la salud por varias razones, como la presencia de nutrientes esenciales, la ausencia de aditivos artificiales y la sinergia de compuestos naturales. He aquí algunas razones por las que los ingredientes naturales pueden aportar beneficios para la salud:

• Ricos en nutrientes esenciales: Los ingredientes naturales, como la fruta, la verdura, los cereales integrales y las legumbres, son ricos en vitaminas, minerales, fibra y fitonutrientes esenciales para el buen funcionamiento del organismo. Estos nutrientes son importantes para mantener un sistema inmunitario fuerte, mejorar la salud cardiovascular y promover el bienestar general.
• Presencia de antioxidantes: Muchos ingredientes naturales son ricos en antioxidantes, como la vitamina C, la vitamina E, los flavonoides y los carotenoides. Los antioxidantes ayudan a combatir los radicales libres en el organismo, protegiendo las células del daño y reduciendo el riesgo de enfermedades crónicas como el cáncer y las cardiopatías.
• Mejora de la digestión y la salud intestinal: Los alimentos naturales, especialmente los ricos en fibra, como la fruta, la verdura, los cereales integrales y las legumbres, favorecen una digestión sana y contribuyen a la salud intestinal. La fibra ayuda a regular el tránsito intestinal, evitando el estreñimiento y favoreciendo un entorno saludable para las bacterias beneficiosas del intestino.
• Menos aditivos y conservantes: Los ingredientes naturales no suelen contener aditivos, conservantes, colorantes artificiales ni otras sustancias químicas que pueden estar presentes en los alimentos procesados. Una menor exposición a estas sustancias químicas puede reducir el riesgo de reacciones adversas y alergias alimentarias.
• Mejor absorción y utilización por el organismo: el organismo tiende a absorber y utilizar más fácilmente los nutrientes de origen natural que los sintéticos. Esto se debe a la forma en que se presentan los nutrientes en los alimentos naturales, a menudo en combinaciones que facilitan su absorción.
• Menor riesgo de enfermedades crónicas: Las dietas ricas en ingredientes naturales, como frutas, verduras, frutos secos, semillas y cereales integrales, se asocian a un menor riesgo de padecer enfermedades crónicas, como cardiopatías, diabetes de tipo 2, obesidad y algunos tipos de cáncer. Estos alimentos proporcionan una variedad de compuestos bioactivos que contribuyen a la salud en general.
• Impacto positivo en el bienestar mental: Consumir una dieta rica en ingredientes naturales también puede tener un impacto positivo en la salud mental. Los nutrientes específicos que se encuentran en los alimentos naturales, como los ácidos grasos omega-3 del pescado y los antioxidantes de la fruta y la verdura, se asocian a una mejor salud mental y a un menor riesgo de depresión y ansiedad.
• Sostenibilidad y menor impacto ambiental: Optar por ingredientes naturales, especialmente los cultivados de forma sostenible, puede beneficiar a la salud ambiental. La agricultura sostenible ayuda a preservar los recursos naturales, reducir la contaminación y fomentar la biodiversidad, contribuyendo a un ecosistema más sano.

En definitiva, los ingredientes naturales ofrecen una amplia gama de beneficios para la salud debido a su composición rica en nutrientes esenciales, antioxidantes y fibra, además de tener una menor carga de aditivos artificiales.

Incorporar estos ingredientes a la dieta puede promover una mejor salud física y mental, además de contribuir a la sostenibilidad medioambiental.