Aceite de cáñamo Annabis, rico en Omega 3
El Aceite de Cáñamo Annabis es un aceite vegetal 100% natural, prensado en frío, conocido por su riqueza en ácidos grasos esenciales, incluidos Omega 3 y Omega 6, y una amplia gama de vitaminas y minerales. Este producto es ideal para su uso diario en la cocina, contribuyendo a una dieta equilibrada y sana. Además, su suave sabor a nuez lo convierte en una sabrosa elección para aliñar ensaladas, platos fríos y otros alimentos.
Nuestro aceite de semillas de cáñamo ecológico es un aceite vegetal de cocina ecológico certificado, extraído de semillas de cáñamo de alta calidad cultivadas ecológicamente. Una alternativa de aceite no refinado de la máxima calidad, extraído del primer prensado en frío de semillas de cáñamo orgánico o industrial para conservar todas sus propiedades naturales.
Principales ventajas:
- Rico en ácidos grasos esenciales: Contiene Omega 3 y Omega 6, esenciales para la salud cardiovascular y cerebral.
- Alto contenido en antioxidantes: Ayuda a combatir el envejecimiento prematuro y favorece la inmunidad.
- Versátil en la cocina: Ideal para añadir a una gran variedad de platos, realzando el sabor y aportando nutrientes esenciales.
Adecuado para:
Este aceite es adecuado para cualquiera que desee enriquecer su dieta con grasas saludables, y es especialmente beneficioso para las personas que quieren mantener una buena salud cardiovascular, mejorar la función cognitiva y promover una piel y un cabello sanos. Es adecuado para todas las edades e ideal para quienes siguen una dieta vegetariana o vegana.
PRESENTACIÓN
500 ml
Beneficios
El aceite de semillas de cáñamo es rico en:
- Más del 80% de ácidos grasos insaturados.
- Vitaminas (A, B – grupos, E, C y D)
- Minerales (calcio, magnesio, potasio y hierro)
- Fitoesteroles
- Colorantes vegetales (clorofila, carotenoides)
Ingredientes
Aceite de semillas de cáñamo 100% certificado ecológico
Prensado en frío y filtrado Rico en Omega 3, Omega 6 y GLA Apto para veganos Sin gluten Sin sal
Consejos de Utilización
Una o dos cucharadas soperas al día, añadidas como condimento a tus platos de pasta o ensalada, o consumidas directamente como complemento alimenticio.
Una vez abierto, guárdalo en un lugar fresco y seco, alejado de fuentes de calor y de la luz directa, para evitar la oxidación y los cambios organolépticos (color, olor o sabor).