Semillas de sésamo Santiveri, ricas en nutrientes
Las semillas de sésamo Santiveri son un alimento versátil y poderoso, lleno de nutrientes esenciales que favorecen el bienestar. Pequeñas pero densamente nutritivas, estas semillas son una excelente fuente de minerales como el calcio, el magnesio y el hierro, que favorecen la salud ósea y refuerzan el sistema inmunitario.
La marca Santiveri garantiza la pureza y calidad de sus semillas de sésamo, ofreciendo un producto natural y sabroso que se adapta fácilmente a tu dieta diaria. El consumo regular de semillas de sésamo Santiveri puede contribuir a una mejor digestión, gracias a su alto contenido en fibra, y ayudar a controlar el apetito, promoviendo una sensación de saciedad prolongada.
Estas semillas son ricas en ácidos grasos saludables, como el omega-6, que favorece la salud cardiovascular. También contienen antioxidantes naturales, como la sesamina, que ayudan a proteger las células contra el envejecimiento prematuro.
Principales ventajas:
- Fortalecimiento óseo: Alto contenido en calcio y magnesio, esenciales para unos huesos y dientes sanos.
- Fuente de antioxidantes: Propiedades antioxidantes que ayudan a combatir el envejecimiento celular.
- Regulación digestiva: El alto contenido en fibra facilita la digestión y favorece la saciedad.
Adecuado para:
Las semillas de sésamo Santiveri son ideales para quien desee fortalecer la salud ósea, reforzar el sistema inmunitario e incluir en su dieta una fuente natural de fibra y grasas saludables. Son perfectas para dietas vegetarianas y veganas, así como para cualquiera que desee una dieta más equilibrada.
PRESENTACIÓN
250g
Beneficios
- Mejora tu digestión
- Son ricas en fibra y ácidos grasos
- También es rico en magnesio
Ingredientes
Semillas de sésamo. De cultivo ecológico.
Por 100 g
- Valor energético 588 Kcal
- Grasas / Lípidos 50,4 g
- Ácidos grasos saturados 6,9 g
- Hidratos de carbono 10,2 g
- Azúcares 0,3 g
- Fibra alimentaria g
- Proteínas 17,7 g
- Sal 0,1 g
Consejos de Utilización
El Sésamo Bio Santiveri 250 g se puede utilizar de muchas maneras en la cocina. Se puede espolvorear sobre ensaladas, yogures, batidos o postres para darles un toque crujiente y nutritivo.
También puede utilizarse para hacer pan, galletas o como ingrediente en recetas de repostería. Recomendamos guardar el producto en un lugar fresco y seco, alejado de la luz solar directa. Una vez abierto, se aconseja consumirlo en un plazo razonable para mantener su frescura y propiedades nutritivas.